Neem
INCI: Melia azadirachta oil
Para la piel:
Hidratación: El aceite de neem es rico en ácidos grasos que proporcionan hidratación profunda a la piel, ayudando a combatir la sequedad.
Antibacteriano y Antifúngico: Contiene compuestos naturales que ayudan a combatir las bacterias y hongos en la piel, lo que puede ser útil en el tratamiento del acné y problemas de piel como la tiña.
Antiinflamatorio: Puede reducir la inflamación de la piel, aliviando problemas como el enrojecimiento y la irritación.
Propiedades Antioxidantes: Los antioxidantes en el aceite de neem pueden ayudar a proteger la piel de los daños causados por los radicales libres y el envejecimiento prematuro.
Alivio para Problemas Cutáneos: Se utiliza tradicionalmente para tratar problemas de la piel como psoriasis, eczema y dermatitis.
Cicatrización: Puede ayudar en la reducción de cicatrices y marcas en la piel, promoviendo la regeneración celular.
Para el cabello:
Fortalecimiento del Cabello: El aceite de neem fortalece el cabello y previene la rotura, lo que lo hace ideal para cabellos frágiles y dañados.
Combate la Caspa: Sus propiedades antifúngicas ayudan a combatir la caspa y a mantener el cuero cabelludo saludable.
Fomenta el Crecimiento: Puede mejorar la circulación en el cuero cabelludo, promoviendo así el crecimiento del cabello.
Prevención de Piojos: El aceite de neem es conocido por ser un repelente natural de piojos.
Brillo y Suavidad: Deja el cabello con un aspecto más brillante y suave, a la vez que lo protege de los daños ambientales.
Es un aceite vegetal fungicida, antiséptico y antimanchas. Se le atribuyen también propiedades para el crecimiento del cabello y como repelente de mosquitos.
Se usa en elaboraciones cosméticas para infecciones cutáneas, acné, sarna, hongos; y como antiparasitario en caso de piojos o pulgas.
Se puede utilizar incluso en animales y en plantas, para alejar las moscas, las garrapatas y los mosquitos.
Solidifica bajo 20°C